Carlos M. Padrón
Lo dicho en el artículo que copio abajo tal vez explique por qué no me preocupa gran cosa el estar solo; de hecho, lo disfruto. De los Cáncer se dice que miramos mucho al pasado, o sea, que somos nostálgicos.
Y por eso no deja de asombrarme, y causarme temor, el pánico que mucha gente tiene a estar sola; es simplemente algo que, según dicen, no pueden soportar, y de ahí que muchos hombres decidan buscar pareja apenas se divorcian, desoyendo así el sabio consejo de no hacer eso hasta que no pase el tiempo requerido para internalizar —o elaborate, como se dice en inglés— su nueva situación, o sea, para aceptarla.
Las consecuencias de tal apresuramiento suelen ser catastróficas para el hombre, aunque no suelen serlo tanto para la mujer con quien éste establezca esa extemporánea relación, mujer que —generalmente, también divorciada— en los más de los casos ya ha internalizado esa condición y está lista para la caza de un compañero.
Tal vez tenga razón Carlos Dossi al decir que “La soledad se rehúye mucho porque son muy pocos los que encuentran compañía consigo mismos”, lo cual me hace recordar que durante mis primeros 18 años de vida, vividos todos en El Paso, escuché muchas veces la expresión “Quien solo se desea, que solo se vea”, siempre dicha con ira, y siempre dicha por mujeres refiriéndose a hombres solterones. Curioso, ¿verdad?
~~~
20/11/2008
Psicólogos de la Universidad de Southampton y de la Universidad china de Sun Yat-Sen han descubierto que la nostalgia puede ayudar a combatir los efectos de la soledad en personas con diferentes formas de vida, desde escolares hasta trabajadores o estudiantes de universidad.
En cuatro estudios realizados, los psicólogos comprobaron que la gente solitaria puede usar los recuerdos nostálgicos de tiempos más felices de su vida para gestionar sus propios sentimientos. El resultado de evocar dichos recuerdos nostálgicos es que con ellos se aumentan las percepciones de apoyo social y se recuperan los sentimientos de conexión con el entorno.
La soledad está relacionada con la percepción de la ausencia de redes de apoyo social, como amigos cercanos o familiares. Esta emoción se soluciona fácilmente buscando compañía en esas redes, pero para las personas solitarias no es tan sencillo, porque no saben formar nuevas redes o expandir las existentes por la pérdida de habilidades sociales o por miedo a dar el paso.
Según los investigadores, el estudio ha demostrado que la nostalgia es un recurso psicológico que protege y fomenta la salud mental, fortalece los sentimientos de conexión social y pertenencia, y repara parcialmente las repercusiones dañinas de la soledad. Los científicos sugieren que la nostalgia sería por tanto un potente mecanismo de superación en situaciones de aislamiento social y personal.
Fuente: Tendencias 21

Tratar de llenar la soledad buscando una nueva pareja de inmediato no la remedia en absoluto, pues la soledad se convierte entonces en una soledad de dos en compañía. Es necesario, antes de nada, aprender a manejarla a solas y, entonces, buscar la nueva pareja si aún se considera necesario y apetecible, lo cual puede suceder.
Respecto a la nostalgia diría lo mismo que respecto al llanto: así como hay llanto que conforta y llanto que hunde, hay también nostalgia que conforta y nostalgia que hunde, por lo que es necesario saber distinguirlas. La mejor expresión del manejo sabio de la nostalgia la encontré en una frase del Gabo: «No llores porque se terminó,… sonríe porque sucedió».
Me gustaMe gusta