La mamá de Pepito estaba embarazada. Un día, acariciando la cabeza de su Pepito, de sólo 6 años de edad, le preguntó con ternura:
”¿Qué quieres que te traiga el Niño Jesús, hijo, ¿un hermanito o una hermanita?»
Y Pepito, mirándola con admiración, le respondió:
”Ay, mamá, pues, aunque te duela mucho… ¡yo quiero una bicicleta!”