[ElPaso}> Personas y personajes. 195X. Parientes en la terraza de mi tío Daniel

  • Cuándo: Primer quinquenio años 50
  • Motivo: Recuerdo familiar
  • Dónde: Terraza de la casa de mi tío Daniel Padrón Sosa

195X. Parientes en terraza de tío Daniel

De izquierda a derecha

Detrás:  1. Antonio Martín Pérez † (Toto Castillo. Primo hermano mío);  2. Carmelina Padrón Sosa † (prima hermana mía);  3. Luz María Padrón Pérez (prima mía por partida doble: prima tercera porque compartimos tatarabuelos, y prima segunda porque compartimos bisabluelos);  4. Erminia Sosa Pino † (Armenia. Madre de Carmelina y tía política mía);  5. María Celia Padrón Pérez † (hermana mía)

Delante:  1. María del Carmen Padrón Pérez (hermana mía);  2. Nereida Martín Fernández † (cuñada de Carmelina)

Nota.- Para más información y sin ánimo de ofender, además de alguna explicación pongo entre paréntesis el apodo o sobrenombre, si lo tienen, por el que estas personas eran coloquialmente conocidas. Si no sé el nombre o primer apellido, pongo en su lugar XX. Y si sé que a fecha de hoy alguna ha fallecido, junto a su nombre pongo el símbolo †. Si no lo pongo donde debería ponerlo o si hay algún otro error, agradeceré aviso al respecto, como también agradeceré que me digan qué nombre o apellido es el que va en vez de las XX.

Foto, cortesía de María del Carmen Padrón Pérez

[LE}> Acentuación: casos especiales

En la aplicación de las normas de acentuación, que se basan en la terminación de las palabras, es preciso tener presentes una serie de casos especiales para el empleo correcto de la tilde.

Las normas generales se pueden exponer de forma sintética del siguiente modo: se acentúan las voces esdrújulas, las agudas que terminan en vocal o en las consonantes ‘s’ y ‘n’ precedidas de vocal, y las llanas o graves que terminan de otro modo, mientras que el resto van sin tilde.

Los casos especiales que hay que tener en cuenta son los siguientes:

  • Lleva tilde toda vocal cerrada (i, u) tónica que va unida a una vocal abierta (a, e, o): oído, desafíos, aúnan, que son todas llanas. De no añadirse, los grupos vocálicos se considerarían diptongos y, por tanto, se pronunciarían /⁠óido/, /desáfios/ y /áunan/. De modo informal y no muy riguroso, se suele decir que la tilde deshace el diptongo. Esta regla también se aplica a los grupos que incluyen una hache muda (tahúr), a los de tres vocales o más (construíais) y a voces compuestas y prefijadas (cortaúñas).
  • Llevan tilde las voces llanas o graves acabadas en dos consonantes cualesquiera: cómics, wéstern. Por el contrario, no llevan tilde las agudas que terminan en dos consonantes (salvo que fuera necesario para deshacer un diptongo): anoraks, pronunciado /anoráks/
  • Se acentúan todas las palabras con valor interrogativo o exclamativo: «¿Cuántos libros hay?», «Preguntó qué hay de comer», «¿Cómo lo hizo?», «¡Quién pudiera ser rico!».
  • Es obligatorio tildar los monosílabos en los que se ha establecido la tilde diacrítica: sé, de saber y ser; dé, de dar; té y tés, como bebida…
  • Los adverbios acabados en ‘-mente’ se acentúan como si este sufijo no existiera: ágilmente de ágil, torpemente de torpe, increíblemente de increíble.

Como se comprueba en los ejemplos anteriores, en lingüística es habitual señalar las pronunciaciones escritas entre barras y con la adición sistemática de la tilde, incluso cuando en la forma escrita no la lleva.

Fuente