«El tsunami causado por la propagación de las ondas atmosféricas se propagó desde el Pacífico al Atlántico, llegando a Canarias más rápido que si hubiera tenido que rodear Sudamérica, como hubiera hecho un tsunami ‘normal», explica«el coautor del estudio, Pablo J. González, del grupo de volcanología del IPNA-CSIC, en La Laguna, Tenerife