Están dos borrachos en un bar, sentados en la barra. En eso se abre la puerta de golpe y entra un caballo al galope, se sube por la pared, pasa por el techo, se baja por la otra pared, llega a la barra y pide un whisky. Se lo toma y pega la misma carrera, por la pared, techo, pared y sale. Uno de los borrachos se vuelve hacia el otro y le pregunta: