Un tipo entra apresuradamente en la discoteca y, entusiasmado, le dice a su amigo:
—¡En el asiento trasero de mi coche tengo a una mujer que es pura candela! Le hice todo lo que quise y pude, y me dejó exhausto. ¡Ve con ella, viejo, y sabrás lo que es sexo!
El amigo salió disparado y, cuando estaba en plena faena con la mujer, llegó un policía, los iluminó con el haz de su linterna y preguntó:
—¿Qué están haciendo?
—Hago el amor con mi esposa—, replicó el tipo.
—Ah, usted perdone—, se disculpó el policía—. No lo sabía
A lo que el tipo, asombrado, respondió:
—Yo tampoco… hasta que usted le iluminó la cara con su linterna
