Día: 23 de abril de 2012

[*Drog}– Amor, drogamor y querer

09-04-12

Carlos M. Padrón

Las frases o pensamientos que siguen, supuestamente salidos de mentes brillantes, muestran a las claras la confusión existente entre amor, drogamor y querer.

Además, algunos son contradictorios, como el que asegura que detenerse a pensar si se quiere a alguien significa que ya no se le quiere, vs. el que asegura que nada está nunca acabado, y el que declara —muy acertadamente, en mi opinión— que amar no es solamente querer.

No, amar no es querer, y estar drogamorado sí es querer pero no amar.

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En el momento en que te paras a pensar si quieres a alguien, ya has dejado de quererle.
Carlos Ruíz Zafón

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Nada está nunca acabado; basta un poco de felicidad para que todo vuelva a empezar.
Émile Zola

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Amar no es solamente querer, es, sobre todo, comprender. Somos y crecemos en la medida en que amamos, y amar significa compartir, servir, y entregarse, algo que representa un camino que nunca acabamos de recorrer.

[*Otros}– Los Canarios en América / José Antonio Pérez Carrión: Domingo Bemel y Umpierres

Era D. Domingo Berriel, a cuya memoria consagramos estas res­petuosas líneas, natural de la isla de Lanzarote, y de las familias más nobles y acomodadas.

Vino a Cuba muy joven, estableciéndose en La Habana, luego en San José de las Lajas, y después en Güines, dedicándose al comercio de ropas.

Persona de claras luces y de una instrucción más que común, muy pronto nuestro comprovin­ciano se abrió paso entre las principales personas de la localidad, llegando a ocupar una posición social bastante desahogada y a gozar de un crédito ilimitado en la plaza mercantil de La Habana, y especialmente en la acreditada casa que llevaba por firma: «José M. Morales y Cía.».

En San José de Las Lajas contrajo desposorios con la respetable y virtuosísima señora Doña Dolores Fernández y Carballo, de cuyo ma­trimonio hubo dos hijos: el distinguido y famoso jurisconsulto Dr. D. Leopoldo Bethel y Fernández, catedrático de la Universidad de La Habana, y la Sra. Doña Clotilde, que casó con el Ldo. en Farmacia D. José Práxedes Alacán y Morales.

Algunos años después nuestro venerable amigo Berriel y Umpie­rres se retiró del comercio y se trasladó nuevamente a La Habana, donde tuvimos el honor de conocerle y tratarle muy afectuosamente; y del cual adquirimos muchas y verídicas noticias respecto a las influencias de nuestros compatriotas en el Nuevo Mundo, que luego nos han servido para la historia biográfica que estamos redactando.

El Señor Berriel y Umpierres era un hombre estudioso y po­seía una gran memoria.

El apellido Berriel y Umpierres es uno de los más antiguos de Canarias, pues data desde que Juan de Bethencourt aportó por pri­mera vez a la isla de Lanzarote.

Este ilustre hijo de las Afortunadas falleció en La Habana el 16 de marzo de 1888, a una edad avanzadísima y dejando un nombre imperecedero.

Perteneció a la Asociación Canaria de Benefi­cencia y Protección Agrícola, desde su fundación, y era altamente entusiasta para todo cuanto tendía al bien de su país en general. Tenía un corazón generoso y humanitario, y jamás llegó a sus puertas un comprovinciano desvalido, a quien él dejara de socorrer.

[*IBM}– Del baúl de los recuerdos: 1959, febrero. Revista ‘La Familia IBM’. Práctica de seguridad

21-04-12

Carlos M. Padrón

Fotos —cortesía de Leonardo Masina, quien las obtuvo de Miguel Badía— tomadas, así como los textos, del número correspondiente a febrero de 1959 de la revista «La Familia IBM».

Aquí agradeceré, más que de costumbre, la ayuda para poner nombres a las personas que aparecen en las fotos. Yo sólo he puesto algunos, pero no estoy 100% de que sean los correctos.

NOTA DEL 24/04/12.- En vista de la dificultad para enumerar, como siempre he hecho, a las personas por filas y por ubicación dentro de éstas, me limitaré a copiar bajo las fotos los extractos que en forma de comentarios me han llegado acerca de las personas que aparecen en ellas,.. a menos que alguien dé datos que me permitan usar la tal numeración

Al final del post están los comentarios completos y los nombres de sus autores.

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Foto 1.- En presencia de un grupo de IBMistas, en su mayoría procedentes del Departamento Técnico, el Sr. Ángel Padrón B. procede a encender el fuego.

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  • De derecha a izquierda:  1, Eduardo Mireles (de traje oscuro);  2, ¿Simón Meléndez?;  3, Beatriz Coronel (a partir de 1960, esposa de Alfredo Carvallo);  4, Conchita Villalta (esposa de Jaime Villalta)

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Foto 2.- El Sr. Arribas espera la orden de «¡Apague!», bomba en mano y temeroso.

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  • Partiendo de la derecha, el segundo es el uruguayo Ernesto Dusio †, instructor de la escuela. Acerca del resto hay datos en las siguientes fotos.

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Foto 3.

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  • El cuarto comenzando por la izquierda es Miguel Badía.
  • Fila delantera. De derecha a izquierda:  1, Eduardo Mireles (de traje oscuro);  2, X. Giménez, de Argentina (en curso de 650 con Hugo Smitter †);  3, Beatriz Coronel (a partir de 1960, esposa de Alfredo Carvallo);  4, Conchita Villalta, (esposa de Jaime Villalta);  5, El Viejo Morales †;  6, X. Vázquez (sup. de Argentina);  7? (Un húngaro, encargado del stock);  8, Santos Vicente Barrios (el que apaga el fuego; 9, X. Barrios (el que está detrás de Santos Vicente Barrios, e hijo de éste)

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Foto 4.- Segundos más tarde, el fuego es completamente dominado ante la expectativa de los presentes. El apagado fue perfecto, y las sonrisas satisfactorias premian la labor del bombero.

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Partiendo del centro de la fila más larga, y de izquierda a derecha: 1, Juan Carlos Dellegrazie (con camisa blanca y brazos cruzados);  2, Fernando Frías;  3, José Antonio González (con lentes);  4, J. Mora (manos cruzadas sobre el vientre y mirando hacia abajo);  5, Jaime Villalta;  6, Luis Díaz (detrás de Jaime);  7, Pedro Frías;  8, Ernesto Dusio †;  9, Régulo Pérez † (el alto que está solo un paso atrás de esa fila);  10, Ramón Molina (que no terminó el curso);  11, Miguel Badía;  12, Francisco Arribas;  13, Noel Ramírez

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COMENTARIOS

CMP
En respuesta a Daniel Vicente.

Gracias. Vicente, por las aclaratorias.

Daniel Vicente
Hola.

Como dice Miguel Badía, en la foto 4 el apagafuegos es Santos Vicente Barrios, o se parece mucho.
En la foto 3 seguro que no es el apagafuegos. Y el nº 9 seguro que no es su hijo, pues en aquella época mi hermano sería un bebé.

Saludos.

CMP
En respuesta a Miguel Badía.

Gracias, Miguel.

Con razón me extrañó que en el comentario anterior mencionaste dos veces a Fernando Frías.

Miguel Badía
Foto 4

Carlos, se me olvidó que el técnico entre José Antonio González y Jaime Villalta, es J. Mora quien, junto con Régulo Pérez y Francisco Arribas, recibió un premio de estímulo por haber ocupado los primeros puestos del curso.

Saludos.

CMP
En respuesta a Miguel Badía.

Gracias, Miguel. Ya hice los cambios que procedía hacer.

Miguel Badía
¡Hola, Carlos! Sigo comentando situándome en la,

FOTO 4.
• Después del centro de la foto, con camisa blanca y con los brazos cruzados me parece que es Juan Carlos Dellegrazie
• Detrás está Fernando Frías, y, a su lado, J.A. Gonzalez
• Le siguen F. Frías, y, a continuación, Jaime Villalta
• Detrás de Jaime está Luis Díaz
• Hacia la derecha está Pedro Frías
• A su lado, Ernesto Dusio y, posiblemente, el que detrás sea J. Carlos D.
• Le sigue Régulo Pérez
• El próximo me parece que es Alibardi
• A continuación, el que escribe, Miguel Badía
• A mi lado, Ramón Molina (que no terminó el curso)
• En la última fila, el segundo es Francisco Arribas, y el último es Noel Ramírez.
• El apagafuegos es Santos Vicente Barrios.

Saludos.

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CMP
En respuesta a Alfredo Carvallo.

Gracias, Alfredo; ya he hecho los cambios. Mañana, en el reencuentro, podremos hablar al respecto, y podrá hablar con otro cuya esposa aparece también en la foto: Jaime Villalta. Él suele llevar a Conchita a estos eventos.

Alfredo Carvallo
Fotos 1 y 3

A la derecha, quien está al lado de Eduardo Mireles parece ser Simón Meléndez, y a su lado está Beatriz Coronel quien a partir de 1960 pasó a llamarse Beatriz Coronel de Carvallo.

José Padrón (el técnico)
Foto 3. La persona identificada como Conchita X. es la esposa de Jaime Villalta.

Foto 4. De quinto, después del Sr. Dusio, me parece reconocer a Miguel Pérez.

Leonardo Masina
Vicencio y Carlos, aquí lo que puedo decirles, según lo que me comentó Miguel Badia.

Fotos 1 y 3. En efecto, la persona con traje oscuro, a la derecha, es Mireles.

Fotos 2 y 4. Partiendo de la derecha, el segundo y el sexto respectivamente es Dusio, el instructor de la escuela.

Foto 4. En el grupito de 3 personas, a la derecha, el tercero es Miguel Badía, que en la Foto 3 es el cuarto comenzando por la izquierda.

Hay mucha gente de Card Plant, que son los de uniforme de trabajo, pero, según Miguel, hay también muchos técnicos de la generación de finales de 1950.

Horacio E. Malcervelli
Carlitos, las fotos son de mi época.

Con algún margen de duda, y por la poca calidad de las fotos, puedo idnetificar:

Foto 3. Fila delantera, de derecha a izquierda,
• Mireles
• Giménez, de Argentina, en curso de 650 con Hugo Smitter
• Beatriz, secretaria del Dpto. Técnico
• Conchita, secretaria del Dpto. Técnico
• El viejo Morales
• Vázquez, sup. de Argentina
• Un húngaro (olvidé su nombre) encargado del stock
• El que esta detrás del que apaga el fuego es el hijo de Vázquez, que lo acompañaba en la visita.

No consigo identificar a los 4 de la extrema izquierda, ni las cabezas que aparecen detrás de Beatriz, de Conchita y del Viejo Morales.

Seguro que también debo estar, perdido, en alguna foto, pero no consigo identificarme.

Abrazos para los todavía vivos, y paz para los que ya se fueron.

El pibe casi eterno.

CMP
En respuesta a Vicencio Díaz.

Gracias, Vicencio, pero no puedo decir ni que sí bno que no, ni todo lo contrario. Esperemos que alguien más se manifieste.

Vicencio Díaz
Foto 1. Me parece distinguir a Mireles, y a la derecha y al centro, en camisa, a Manzano.

Foto 3. El segundo, de derecha a izquierda, me luce que es Américo Cristini.

Recuerdo que, en 1967, Francisco Arribas —mejor conocido como PACO— se fue como supervisor de campo a Maracaibo donde falleció muy temprano. Era muy aficionado a la carpintería como también a hacer vino de pasas.

Puede que me equivoque en todo, pues la ceguera es mucha, pero me alegra recordarles.