Nuestro compatriota, el licenciado en jurisprudencia Antonio de Chávez, de cuyos personajes nos hemos ocupado en otro lugar de la historia de los Canarios en América, después de haber acompañado a Francisco de Pizarro en la conquista de Perú, fue nombrado gobernador de Cuba, tomando posesión de su elevado cargo el 4 de junio de 1547, reemplazando a Juan de Dávila.
En su administración y gobierno de la Isla, que duró tres años, se promovió el importantísimo proyecto de traer agua del río Almendares para surtir a La Habana.
Este proyecto fue aprobado por Real Orden del 11 de febrero de 1548, facultando al Ayuntamiento de la dudad capital de Cuba para establecer la «Sisa de Zanja» y costear el acueducto que habría de conducir tan precioso líquido.
Antonio de Chávez llevó asimismo a efecto la total emancipación de los indios esclavos, que le valió las censuras y calificativos más absurdos por parte del impertinente caciquismo.
Este ilustrado hijo de las Islas Canarias falleció en Madrid, después de haber prestado grandes e importantes servicios a la patria.
