[LE}– ‘Dar que hablar’, no lleva tilde en ‘que’

25/03/2013

El pronombre relativo que, en las locuciones dar que hablar, dar que pensar, dar que decir,… se escribe sin tilde.

Aunque en estas locuciones, que se pronuncia a veces con la fuerza de una palabra tónica, lo apropiado es escribirla sin tilde, pues no tiene valor interrogativo o exclamativo, tal como indica el Diccionario Panhispánico de Dudas en el apartado 1.8. de la entrada que.

Por lo que en frases como,

  • «Una cifra que debería dar qué pensar a los Gobiernos de toda la Unión Europea» o
  • «Ayrton Páez empieza a dar qué hablar en la región»,

lo aconsejable habría sido escribir sin tilde el pronombre relativo que.

Sin embargo, en las locuciones dar de qué hablar o dar en qué pensar, donde qué sí tiene valor interrogativo y es palabra tónica, lo apropiado es acentuarla gráficamente.

Fuente: Fundéu

[LE}– Una quita no es un impuesto ni un gravamen

20/03/2013

La palabra quita, frecuente en el vocabulario económico, alude a la cancelación total o parcial de una deuda que hace el acreedor al deudor.

Sin embargo, con motivo del acuerdo alcanzado entre la eurozona y el Gobierno de Chipre para el rescate financiero de ese país, es frecuente ver en los medios la palabra quita aplicada a una de las medidas incluidas en ese pacto: la imposición de un gravamen o impuesto especial sobre los depósitos bancarios.

Así se pueden leer frases como

  • «Los chipriotas, indignados por la quita de sus depósitos» o
  • «Chipre y la troika acuerdan una quita menos dolorosa para los pequeños ahorradores».

En estos casos no se hace referencia a la condonación de una deuda sino a un gravamen o impuesto especial, que se aplicará por una sola vez, sobre las cantidades depositadas en las entidades bancarias.

El texto original del acuerdo, en inglés, se refiere a esta medida como one-off levy, cuya traducción al español puede ser gravamen o, más precisamente, gravamen único. También podría hablarse de un impuesto extraordinario.

De esta forma, en los ejemplos anteriores lo adecuado habría sido escribir «Los chipriotas, indignados por el gravamen único sobre sus depósitos» o «Chipre y la troika acuerdan una impuesto extraordinario menos doloroso para los pequeños ahorradores».

Se recuerda además que la palabra gravamen se escribe sin tilde.

Fuente: Fundéu

[LE}– Origen o uso de palabras, dichos y expresiones: Gazpacho

20-07-12

Si hay un plato típico por excelencia cuando hace calor, ese plato es el Gazpacho.

Formas de hacer un gazpacho hay muchas, tantas como personas lo hagan. Posiblemente el gazpacho sea una de las comidas más antiguas de la Humanidad, pero no hay una fecha concreta en los escritos que relate con exactitud cuándo fue “inventado” este delicioso y, a la vez, refrescante plato.

Se tienen unas primera referencias que se remontan al siglo I a.C. ya que el poeta Publio Virgilio en su escrito “Égloga II” habla de un plato rural que se preparaba majando varias verduras, ajos y hierbas.

El nombre gazpacho viene de una voz prerromana que significa residuo, ya que el plato se preparaba con migas de pan y vegetales troceados que generalmente habían sobrado de anteriores comidas.

Cortesía de Leonardo Masina

[LE}– ‘Ecologizar’, neologismo bien formado

01/02/2013

Ecologizar es un verbo bien formado y adecuado para referirse a la acción de ‘hacer o convertir algo en ecológico’.

Ecologizar es una formación regular a partir del adjetivo ecológico y el sufijo –izar, que, según el Diccionario Académico, ‘forma verbos que denotan una acción cuyo resultado implica el significado del adjetivo básico’, como en homogeneizar o en impermeabilizar.

Así, en los medios de comunicación se observan a veces informaciones como

  • «Siete maneras de ecologizar tu vida» o
  • «Hay que ecologizar el modelo de desarrollo»,

en las se emplea con propiedad ecologizar, que puede convivir en el uso con otras formas, como hacer ecológico, de las que es sinónima, pero frente a las que presenta la ventaja de ser más breve.

Fuente: Fundéu

[LE}– ‘Estar acorde’ de concordar en número con el sustantivo

07/03/2013

En la construcción estar acorde, el adjetivo acorde debe concordar en número con el sustantivo al que hace referencia, tal y como se indica en el Diccionario Panhispánico de Dudas.

Sin embargo, suelen encontrarse en los medios frases en las que acorde permanece invariable:

  • «Las medidas de seguridad en Chile deberían estar acorde con esa realidad» o
  • «Criticó que los profesores no estén acorde con los nuevos tiempos».

Lo apropiado en estos casos habría sido decir

  • «Las medidas de seguridad en Chile deberían estar acordes con esa realidad» y
  • «Criticó que los profesores no estén acordes con los nuevos tiempos».

Sucede lo mismo en construcciones similares como resultar acorde, parecer acorde, ser acorde,

Fuente: Fundéu

[LE}– ‘Rastreabilidad’, alternativa a ‘trazabilidad’

04/03/2013

La palabra rastreabilidad puede alternar con trazabilidad para referirse a la ‘posibilidad de identificar la procedencia de un bien de consumo’.

El Diccionario Panhispánico de Dudas recomendaba emplear el sustantivo rastreabilidad «para designar la posibilidad de rastrear el camino seguido por un producto comercial desde su origen hasta su destino final, así como el registro de todos los datos que permiten realizar dicho seguimiento».

Pese a que en esta obra se desaconsejaba el sustantivo trazabilidad porque trazar no significa en español ‘seguir el rastro’ —a diferencia de lo que sucede con el verbo inglés to trace—, el uso ha impuesto este sustantivo, que ya se recoge en el avance de la vigesimotercera edición del Diccionario Académico.

En este sentido, en los medios de comunicación es habitual encontrar frases como

  • «Mayor control sobre la trazabilidad de la leche del queso Gamonéu» o
  • «Francia va a proponer imponer obligaciones sobre la trazabilidad de la carne en las etiquetas de los platos preparados»,

ambas válidas, en las que también podría haberse optado por el sustantivo rastreabilidad como recurso de enriquecimiento léxico si en la noticia se alude a este concepto reiteradamente.

Fuente: Fundéu

[LE}– ‘Meme’, neologismo válido

28/02/2013

El neologismo meme se escribe en redonda y sin comillas.

Este término, creado por Richard Dawkins en su libro «El gen egoísta», aparece definido en el diccionario Webster como ‘idea, comportamiento, moda o uso que se extiende de persona a persona dentro de una cultura’.

Por otra parte, meme se emplea cada vez más para referirse a cualquier imagen o texto, a menudo de contenido humorístico, que se comparte viralmente en las redes sociales durante un periodo breve.

Aunque aún no aparece recogido en los principales diccionarios de español, su grafía es respetuosa con las normas ortográficas del español y puede considerarse un término correcto, válido para ambas acepciones, y escribirse sin ningún resalte tipográfico.

Así, en

  • «»Obama y su habilidad con el fusil» se convierten en meme»

el neologismo está bien empleado y escrito, mientras que en

  • «Campaña contra la revocatoria en Lima genera divertidos “memes” deportivos» o
  • «Crean memes por el gol en propia meta de Cristiano Ronaldo»,

lo apropiado habría sido prescindir de las comillas y la cursiva.

Es una palabra masculina y su plural es regular: los memes.

Fuente: Fundéu

[LE}– Origen o uso de palabras, dichos y expresiones: Ganar, campeón y victoria

03-06-12

Ganar

Según Joan Coromines, la palabra ganar procede probablemente del gótico ganan, que significa codiciar, y está relacionado con el escandinavo antiguo gana (= abrirse la boca, desear con avidez).

El significado de nuestro verbo en español evolucionó bajo el influjo de otro verbo romance procedente del germánico, waidanjan, que significa cosechar, ganar.

La misma raíz está detrás del origen de la expresión ganapán, que alude a la maldición bíblica «ganarás el pan con el sudor de tu frente».

Campeón

Deriva del italiano campione que, a su vez deriva del germánico kamp, «campo de ejércitos militares» o «campo de batalla».

Victoria

Deriva del vocablo latino victor, «vencedor».

Fuente: MUY

[LE}– ‘En espera’ y ‘a la espera’ son expresiones adecuadas, pero no ‘a espera’

14/02/2013

Sin embargo, en los medios de comunicación se encuentran frecuentemente ejemplos de uso de la construcción a espera:

  • «Los fieles se encuentran ahora a espera de la elección de un nuevo Papa» o
  • «A espera de la fumata blanca».

En espera se recoge en el Diccionario Académico con el significado de ‘estar a la expectativa o en observación de que ocurra algo’, y tanto esta expresión como a la espera se encuentran también en el diccionario de uso Clave con el mismo significado, mientras que a espera no aparece recogida en ningún diccionario.

Atendiendo a esto, en los ejemplos anteriores lo apropiado habría sido escribir

  • «Los fieles se encuentran ahora en espera de la elección de un nuevo Papa» y
  • «En espera de la fumata blanca»,

por un lado, o

  • «A la espera de la elección de un nuevo Papa» y
  • «A la espera de la fumata blanca»,

por otro.

Fuente: Fundéu