[LE}– ‘Fortísimo’ y ‘fuertísimo’, ‘pobrísimo’ y ‘paupérrimo’, pares de superlativos

02-07-2017

En español algunos adjetivos admiten dos formas superlativas diferentes: así, fuerte puede formar fuertísimo, considerado popular, y fortísimo, y pobre da lugar tanto a pobrísimo como a paupérrimo.

En los medios de comunicación se encuentran ejemplos como

  • «Imágenes fuertísimas y una campaña contra las letras machistas del reguetón»,
  • «Tras el fortísimo choque, la mujer de 26 años falleció en el acto»
  • «El juego desplegado fue pobrísimo» o
  • «10 goles en 75 partidos es un bagaje paupérrimo para un delantero del Valencia»,

todos válidos.

El Diccionario de la Lengua Española señala que el adjetivo fuerte puede presentar dos superlativos: el regular fuertísimo, considerado popular o conversacional según la Gramática, y el irregular y culto fortísimo. Del mismo modo, a partir del adjetivo pobre se forman los superlativos pobrísimo y la variante culta paupérrimo.

La Academia recoge otros dobletes similares, como ocurre con los adjetivos cierto, antiguo o reciente, entre otros, cuyos posibles superlativos son ciertísimo o certísimo, antiquísimo o antigüísimo, recientísimo o recentísimo, nuevísimo o novísimo, lejísimos o lejísimo, respectivamente.

Se recuerda que, si bien la mayoría de los adjetivos forman el superlativo con el sufijo –ísimo, los que utilizan el sufijo -érrimo parten de un adjetivo que incluye la letra erre en la última sílaba: libre/libérrimo, negro/nigérrimo (también es válido y más frecuente negrísimo), mísero/misérrimo…

Fuente