Un equipo de investigadores ha estudiado los últimos 75 años de granizadas y ha observado un preocupante aumento de este tipo de tormentas en regiones del sur de Europa como España
Ningún método es 100% preciso, pero muchos investigadores se enfrentan a un dilema cuando tratan de asignar un sexo a restos que, en muchos casos, han pasado siglos bajo tierra