[*IBM †}– Mario Esquivel

Mario Esquivel 

  • Fecha: 20/06/2016
  • Lugar: Isla de Margarita (Venezuela)
  • Causa: Infarto fulminante
  • Edad: 68
  • Posición en IBM: Marketing
  • Nació en: Ciudad de Guatemala el 18/08/1947
  • Sus restos fueron incinerados en el Cementerio del Este (Caracas), y entregados a su hijo mayor.

Información adicional

El velatorio ha sido anunciado para el 22 de junio en horas de la tarde en el Cementerio del Este (La Guairita, Caracas). Lo que tengo hasta ahora me ha sido suministrado por el exIBMista Pedro Mazzei. 

Según me informa desde Costa Rica el exIBMista Manuel Alberto Gutiérrez, el padre de Mario nació en Panamá, de padres costarricenses, y la madre nació en Guatemala. A muy temprana edad, Mario llegó a Barquisimeto (Venezuela). 

In memoriam

En 1976, Mario trabajaba en la Sucursal Finanzas de IBM de Venezuela en la que yo era marketing manager. Un día supo que yo quería comprar una casa que estuviera relativamente cerca de IBM-Chuao, porque desde el lugar donde yo entonces vivía (Vista Alegre, al oeste de Caracas) tardaba 45 minutos en llegar hasta el trabajo, además de que dormía muy mal porque al lado habían construido un hospital y tal parecía que las ambulancias que de emergencia llegaban a él pasaban bajo mi cama.

Mario me dio la dirección y nombre de una quinta que estaba en venta en Lomas de La Trinidad, y a verla fuimos Cecilia (mi entonces mujer) y yo. No nos gustó, y al salir de ella nos llamó la atención otra quinta, a todas luces recien construida, con un anuncio de que estaba en venta. Entramos, la vimos, y ésa fue la que compré.

Debo agradecer a Mario Esquivel que la casa que ha sido mi vivienda familiar durante 40 años, y en la que se criaron mis hijas y dos de mis nietos, la conseguí gracias a él.

Carlos M. Padrón

[LE}– Leísmo, laísmo y loísmo. Claves

16/06/2016

Los pronombres le, la, lo y sus correspondientes plurales son motivo de dudas, y no es raro que se usen impropiamente en lo que se conoce como leísmo, laísmo y loísmo, respectivamente.

A continuación se ofrece una serie de pautas para su empleo adecuado:

1. La elección entre un pronombre u otro depende en esencia de que funcione como complemento directo (la/lo) o indirecto (le). No depende de que sea persona, animal o cosa. La principal dificultad es que no siempre resulta fácil determinar el tipo de complemento si éste se refiere a persona, pero hay obras como el Diccionario del Estudiante, el Salamanca o el Diccionario del Español Actual que ofrecen esta información, al menos para el directo, y que, por tanto, son una importante guía.

2. Lo se emplea como complemento directo, sólo para el caso del masculino: «Lo alabaron mucho (a él)», «El códice lo robaron en enero».

3. La también se emplea para el complemento directo, pero referido al femenino: «La alabaron mucho (a ella)», «La entrega de los premios la efectuó el presidente».

4. Le se emplea como complemento indirecto, tanto para el masculino como para el femenino: «Le dijeron (a él o a ella) una mentira», «Le extirparon (a él o a ella) el bazo», «Le echó gasolina al automóvil».

Más allá de estas indicaciones básicas, hay que tener presentes las siguientes observaciones.

5. No obstante, hay zonas en las que le se emplea también como complemento directo cuando se refiere a personas del sexo masculino y en singular. En este caso específico se admite el leísmo, aunque se recomienda el empleo de lo. De este modo, resultan admisibles «Le alabaron mucho (a él)» y «Le vi por la calle (a él)», pero se desaconsejan «Les alabaron mucho (a ellos)», pues no está en singular, y «Le consideraba una mujer decidida», pues se refiere a una mujer.

6. El leísmo no se considera apropiado referido a animales y cosas, de modo que «Se le desbocó el caballo y no pudo dominarle» debería ser «Se le desbocó el caballo y no pudo dominarlo» y «Se le perdió el reloj y no le encontró» debería ser «Se le perdió el reloj y no lo encontró».

7. Tampoco lo es referido a nombres femeninos, ya sean de personas, animales o cosas: «Comunicó a la diputada que no podía recibirle» debería ser «Comunicó a la diputada que no podía recibirla» y «Se le perdió la cartera y no le encontró» debería ser «Se le perdió la cartera y no la encontró».

8. Los verbos usados con los significados que los diccionarios marcan como intransitivos no admiten complemento directo, por lo que en ellos no es posible usar lo/la y será siempre le.

9. Como regla práctica, en verbos como ver, fotografiar, retratar, tocar, limpiar… se emplea lo o la si nos referimos a la persona, pero le si además aludimos a una parte de su cuerpo (o algo que posee) en función de complemento directo: «Lo vi por la calle» frente a «Le vi la mano», «La tocó en la mano» (en la mano es complemento de lugar) frente a «Le tocó la mano».

10. Por otra parte, la regla que se basa en preguntar «¿a quién?», que se ve en ocasiones en las gramáticas elementales, no sirve para determinar si un complemento es directo o indirecto, sino tan sólo si es de persona. Por ello, no debería usarse, pues es fuente de leísmos, como tampoco «¿para quiénes?», que no siempre funciona.

Puede encontrarse una explicación más detallada, con numerosas particularidades que no caben en una explicación tan resumida, en las entradas laísmo, loísmo y leísmo del Diccionario Panhispánico de Dudas y en el artículo sobre leísmo de la Wikilengua.

Fuente

[Hum}– Disfrute del sexo

Un hombre y una mujer que bebían juntos en un bar entablaron una discusión acerca de quién, si el hombre o la mujer, disfrutaba más del sexo.

El hombre dijo:

—Es obvio que los hombres disfrutamos más. ¿Cómo, si no, puede explicarse nuestra obsesión por el sexo?

—Eso no significa nada— contestó la mujer—. Si no, analiza esto: cuando te pica el oído te metes el dedo, lo giras, lo sacas y vuelves a repetir. ¿Cuál crees que disfruta más eso, el oído o el dedo?