13/06/2016
La expresión adecuada correcta para referirse a una cabeza que ha sido separada del cuerpo es cabeza cortada o cercenada, no decapitada.
En los medios de comunicación, sin embargo, aparece a menudo el giro impropio, como se puede comprobar en los siguientes ejemplos:
- «Cuelgan la cabeza decapitada de un lobo en una señal de tráfico»,
- «Aparece la cabeza decapitada de un supuesto mafioso» o
- «Descubren la cabeza decapitada más antigua del Nuevo Mundo».
El verbo decapitar significa, según el Diccionario Académico, ‘cortar la cabeza’, por lo que el giro cabeza decapitada significa ‘cabeza a la que se ha cortado la cabeza’, que carece de sentido.
Sí se puede hablar de decapitar un cuerpo, un animal o una persona, y también, en sentido figurado, una organización o institución, aunque en este último caso es más frecuente emplear el término descabezar.
De este modo, en los ejemplos anteriores lo mejor correcto habría sido escribir, por ejemplo,
- «Cuelgan la cabeza cortada de un lobo en una señal de tráfico»,
- «Aparece la cabeza cercenada de un supuesto mafioso» y
- «Descubren la cabeza cortada más antigua del Nuevo Mundo».
En el primer ejemplo podría optarse también por «cabeza de un lobo decapitado», pues fue a ese animal al que le separaron la cabeza, y a menudo podría prescindirse de la precisión, pues se sobrentiende, como en el segundo ejemplo.
