[Hum}– Del ‘amor’ entre gallegos y argentinos: La gallega y el crucifijo Una mujer gallega entra en una tienda de imaginería y pregunta: —Oiga, ¿cuánto cuesta ese crucifijo? —Diez mil pesetas. —¿Y sin el gimnasta? Comparte este artículo Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva) Correo electrónico Haz clic para compartir en X (Se abre en una ventana nueva) X Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) Facebook Relacionado