[Hum}– Del ‘amor’ entre gallegos y argentinos: El gallego curioso

Un árabe, que jamás había pagado una deuda, le pidió dinero prestado a un judío que nunca había perdido ni un centavo en ninguna transacción.

Pasó el tiempo y el árabe vivía escondiéndose del judío por lo que éste nunca lograba agarrarlo para que le pagara, pero un día, por mero accidente, se toparon en un bar propiedad de un gallego y ahí comenzaron a discutir.

El árabe, acorralado, optó por una salida drástica: sacó una pistola, la apoyó contra su sien, y dijo:

—Podré irme al infierno, pero no pagaré esta deuda.

Apretó al gatillo y cayó muerto de inmediato.

El judío, que no se daba por vencido fácilmente, agarró la misma pistola, la apoyó contra su sien, dijo:

—¡Voy a recibir este dinero aunque sea en el Infierno!

Tiró del gatillo y cayó muerto.

El gallego, que había observado todo, tomó entonces la pistola, la apoyó contra su sien, dijo:

—Pues vamos, hombre, ¡que por nada del mundo me pierdo yo esta pelea!

….y apretó el gatillo.