Marido y mujer fueron a cenar a un restaurante. Apenas les sirvieron la comida, el marido dijo:
—Luce delicioso. ¡A comer!
Ella objetó:
—Cariño, en casa siempre elevas una oración antes de comenzar a comer.
A lo que él respondió:
—Sí, cariño, eso es en casa, pero aquí el chef sabe cómo cocinar.
