Un gallego en el correo.
—¿Cuánto cuesta enviar una carta a Pontevedra?—Cuesta euros, señor.
—¿Y enviar dos cartas?
—Le costará 4 euros.
—¿Y tres cartas?
—Señor, ¡tres le costarán 6 euros!
—No, no me conviene. Me va a costar mucho dinero mandarle LOS NAIPES a mi mamá.
