[*ElPaso}– “Dándole vueltas al viento” / Poemas de Antonio Pino Pérez: Plenitud

PLENITUD

Es mediodía. El pleamar te llena
y tú sabes, con toda exactitud,
que has llevado a la muerte que serena
tu ganada y rotunda plenitud.

Nada falta ni sobra. Ríes plena
el triunfo que atesora tu virtud,
y corregida de extravíos, buena,
te sostiene la paz en la quietud.

Arriba estás en el cenit de altura
sumergida en las anchas claridades
que te descubren su mayor hondura.

Ya no subas ni bajes. Permanece
y espera, en posesión de tus verdades,
a la verdad suprema que amanece.

1959

[Opino}– Cabello, vello y pelo,… y la evasiva de don A. de Miguel

En Libertad Digital del 13/12/2007, columna Lengua Viva, de Amando de Miguel, encontré lo siguiente:

José Manuel Roldán (Sevilla) me aclara que en México se distingue muy bien entre pelos, vellos y cabellos.
• Los cabellos son los pelos de la cabeza,
• Los vellos son los pelos del resto del cuerpo humano; y,

• Los pelos lo son de los animales.

Excelente distinción. Me recuerda la de ‘cadera’ para las personas y ‘anca’ o ‘grupa’ para algunos mamíferos. Cuando se aplica la voz animalesca a una persona, esa decisión se suele hacer con un propósito afrentoso. Véase, por ejemplo, ese sentido en muchas expresiones en las que aparece la voz pelo aplicada al hombre con un tono despreciativo.

Antes esto, le envié al Sr. A. de Miguel el siguiente e-mail:

From: Carlos M. Padrón
Sent: Thursday, December 13, 2007 8:16 AM
To: Amando de Miguel
Subject: [LE}– Cabello, vello y pelo

Esta clasificación, que para mí tiene el inconveniente de que hace de las peluquerías centros de estética para animales, no recuerdo haberla encontrado en ningún país de Hispanoamérica que yo haya frecuentado. Y excepto El Salvador y Nicaragua, los he frecuentado todos.

Ahí siguen usándose en relación a personas expresiones como,

• “Se me pusieron los pelos de punta”. (“Se me pusieron los vellos de punta” suena ridículo)
• Tiene pelo negro, blanco, canoso, entrecano, rubio, negro, etc.
• “No tiene un pelo de tonto”
• Las mujeres pelean tirándose de los pelos, o de las greñas

Y existen peluquerías para damas, peluquerías para caballeros, y peluquerías caninas.

Eso de ‘cabello’ suena, al menos todavía, como un rebusque —creo que usted suele decir ñoñismo— para evitar decir ‘pelo’, y no se entiende por qué. El uso más frecuente y normal de ‘cabello’ es su derivado, ‘cabellera’.

Y en Libertad Digital de hoy, 10/01/2008, columna Lengua Viva, de Amando de Miguel, encontré lo siguiente:

Carlos M. Padrón entiende que lo de “cabello” para no tener que decir “pelo” es simplemente un “rebusque” o ñoñismo. Entiendo que no siempre. El dulce conocido como “cabello de ángel” sería menos atractivo si fuera “pelo de ángel”.

Creo que el señor de Miguel escogió la vía fácil recurrriendo a una respuesta bastante sesgada e incompleta, pues obvia el meollo de mi objeción: Si pelos son los de los animales, entonces las peluquerías son centros de estética para animales, y está claro que las peluquerías no son eso.