El descubrimiento de unas ruinas en la provincia china de Shandong sitúa el inicio de la construcción de la Gran Muralla 300 años antes de lo que se pensaba hasta ahora, con sus tramos más antiguos erigidos entre finales de la dinastía Zhou (1046-771 a.C.) e inicios del Periodo de Primavera y Otoño (770-476 a.C.).