En un innovador estudio de imágenes cerebrales realizado por investigadores del Departamento de Etología de la Universidad Eötvös Loránd (Hungría), se demuestra que los cerebros de los perros diferencian dos idiomas y pueden detectar el habla. Este trabajo, que aparece en NeuroImage, es la primera demostración de que un cerebro no humano puede diferenciar dos idiomas